La empresa británica Vertical Aerospace fue la encargada de crear el primer taxi aéreo eléctrico. Este vehículo recorre distancias de hasta 500 millas y cuenta con el espacio para un piloto y 4 pasajeros. Está inspirado en el diseño de un drone para que tenga mayor estabilidad a lo hora de volar y no requiera de lugares específicos para poder aterrizar.
Sus creadores se basaron en la necesidad de las personas de transportarse fácil y rápidamente, sin tener que soportar las miles de horas en los largos trancones.