¿Se puede querer a una bestia? A esta, sin duda, sí. Es peluda, muy noble, fiel y siempre dispuesta a cumplir los deseos de su inseparable compañera de juegos.
Se trata de Rudy, un perro de raza Goldendoodle quien acompaña a Emily, de tan solo tres años, en una escena digna de cuento de hadas: el baile de la bella y la bestia. El vídeo se ha viralizado y ha sido compartido miles de veces en Facebook, Instagram, YouTube y Twitter.
Recrearon una de las escenas icónicas de este clásico animado del cine. Todo un homenaje a la inocencia, con la música de fondo y los trajes de la época la niña y su mascota disfrutaron de un baile único, como en la película de Disney.