El hombre enfrenta ahora un escenario poco favorable.
En marzo, Kenneth Perry, esposo de Nicki Minaj fue arrestado por no registrarse como agresor sexual en California como la ley lo indica (De joven fue condenado por ello en Nueva York). Tras pagar una fianza se encuentra en libertad condicional, pero ahora pide a la justicia una oportunidad.
Luego de anunciar el embarazo de Nicki Minaj, Perry solicitó a la corte que le modifiquen los permisos y términos de su libertad condicional, para poder acompañar a su esposa e hijo una vez llegado el momento del parto. A lo anterior se suma que Perry ahora figura como manager de la rapera, y para cumplir con los compromisos que existen, él quiere que se le permita viajar.
Finalmente, el juicio aún no se ha celebrado por lo que Minaj y su pareja tendrán que esperar qué dictamina la ley en su caso.