Porque todo proyecto debe tener buenas bases.
En una sociedad que ha visto cómo cada vez más personas se unen al mundo del fitness, es normal ver o empezar a tener esa curiosidad propia de hacer parte de este grupo en contínuo crecimiento.
De esta manera, así como aumenta el entusiasmo, también aumentan los riesgos de lesiones, daños y es por eso que hoy, en Dicomanía, compartimos para ti que puedes estar pensando en iniciar un nuevo camino en el sendero del ejercicio, algunos consejos para que tu experiencia sea lo más provechosa posible.
DEFINE OBJETIVOS
¿Quieres marcar tu cuerpo? Bajar de peso? ¿Tonificar los músculos? Debes saber exactamente qué quieres lograr, para así mismo saber qué debes hacer. Hacer ejercicio sólo por hacerlo, no es tan bueno, en especial porque no sabrás si está funcionando o no tu esfuerzo. Por ello, es clave saber qué deseas, antes de emprender esta ruta.
INSPÍRATE
Ya con un objetivo en mente, es más fácil convencerse a sí mismo de trabajar, Ahora, sólo debes mentalizarte y estar en constante evolución, convenciéndote de tus capacidades, y de que es posible y muy real llegar a tus propósitos.
PREPÁRATE PARA LOS OBSTÁCULOS
En el ejercicio como en la vida, es normal y seguro que encontrarás obstáculos en tu camino: un resfriado, una lesión, poco tiempo para entrenar. Por ello, siempre hay que tener presentes que los contratiempos pueden suceder, pero todo dependerá de cómo te prepares tú para afrontar y superar esas trabas a tus esfuerzos. Nada te detendrá si tienes un plan B.
Finalmente, un consejo extra y en lo personal creo que es el más importante de todos:
LA TÉCNICA LO ES TODO. No sirve de nada que hagas 100 flexiones de pecho en una hora, si las haces mal, con la exigencia equivocada, el desgaste erróneo, y la calidad adecuada, porque: 1: No se sacará todo el provecho del esfuerzo. 2: Estarás más propenso a lesiones. 3: Realmente no estarás en el tope de exigencia que deberías.
